3/20/2006

¿Qué dice la encuesta de María de las Heras en Milenio?


“AMLO: 38% (+2); Calderón: 29% (-1); Roberto Madrazo: 30% (-1); Mercado 2%; Campa: 1%. (El Número en paréntesis corresponde a la variación con respecto al último mes.

(La imagen la coloco con fines de divulgación. Espero que no le moleste a Milenio)
La encuesta confirma lo que ya habían señalado los estudios de Reforma y El Universal: en el último mes, AMLO subió un par de puntos, mismos que perdieron Calderón y Roberto Madrazo. Con esos ligeros movimientos, el candidato del PRD llega a 38%; nueve puntos por encima de Calderón y a ocho de distancia de Roberto Madrazo.

1 Comments:

At 3:43 a.m., Anonymous Anónimo said...

Mario te falto decir esto:

20-Marzo-06

Si algo he aprendido durante estos diez y siete años haciendo encuestas electorales, es que uno debe quitar de las encuestas ese “ruido” que rodea las campañas y que provoca cambios en el estados de ánimo de los electores, pero que en realidad poco efecto tiene en las preferencias electorales que realmente están definidas.

No alcanzo a comprender por qué hay encuestadores (GEA/ISA, REFORMA) que en un lapso no mayor a tres semanas, registran cambios radicales en las preferencias electorales de un gran número de electores. No lo alcanzo a comprender no sólo porque mis encuestas no los registran, sino porque sinceramente en las últimas semanas yo no conozco a nadie que haya cambiado de opinión sobre los contendientes y sus partidos, y cada vez que le pregunto a quienes me rodean si ellos conocen a alguien que efectivamente haya cambiado de opinión, siempre he obtenido un no por respuesta, y si ustedes que hacen el favor de leer estas líneas hacen el experimento verán que tampoco van a encontrar muchos conocidos que hayan cambiando su intención de voto en el último mes.

Los candidatos con sus campañas siguen hablándoles a los mismos electores, hasta ahora se han dirigido a quienes de inicio podían pensarse como sus posibles simpatizantes. Las últimas noticias han sido muchas, pero ninguna ha significado una información adicional y realmente sorpresiva, como para que pudiera desvirtuar la predisposición que los electores tenemos frente a cada una de las opciones políticas.

A lo más lo que ha ocurrido de febrero a la fecha es que un millón de electores que se sumaban a los cambiantes que hace un mes no hubieran votado por ninguno de los candidatos, ahora parece que estarían dispuestos a votar por López Obrador. Los otros sesenta y nueve millones de electores o persisten en no votar, o lo seguirían haciendo por el mismo candidato por el que lo hubieran hecho hace un mes.

Las campañas de enfrentamiento entre candidatos, concentradas en las alusiones personales entre unos y otros, lo único que consiguen es radicalizar las posiciones pre-existentes. Aún en la elección del Estado de México tan llevada y traída la semana pasada, si nos remitimos estrictamente a los números y tomamos en cuenta que se trataba de un universo de nueve millones de electores, de noviembre a la fecha apenas se registró cambio en aproximadamente quinientos mil de ellos. Como la inmensa mayoría de los electores del Edomex persistió en su decisión de no votar, ese pequeñísimo porcentaje del total de electores que cambió el sentido de su voto fue suficiente para dar la impresión de que la historia en marzo había sido radicalmente distinta a la de noviembre, Montiel y AMLO mediante.

 

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